Una de las grandes contribuciones de Galileo Galilei fueron las observaciones astronómicas publicadas en latín en el libro Sidereus Nuncius, “El mensajero celestial” (1610). En él expuso cómo el telescopio que él mismo construyó le permitió observar la existencia de cráteres y montañas en la Luna, manchas en el Sol, descubrir los 4 mayores satélites de Júpiter (Ío, Europa, Ganimedes y Calixto) y observar que las estrellas fijas siguen siendo puntuales como a simple vista.
El Museo Nacional de Ciencia y Tecnología pone a nuestra disposición la traducción de la obra de Galileo al Castellano, Gallego, Catalán y Euskera en este enlace.

Portadas de la traducción del Sidereus Nuncius (Fuente)